BRAHMANISMO

Shiva

En la India, según cuenta la mitología hindú, cuando los demonios y deidades batieron en una mantequera el Mar de Leche, 14 joyas aparecieron. Una de ellas era un veneno poderosísimo que ni las deidades ni los demonios podían soportar. La leyenda dice que puesto que los humos venenosos amenazaban con desvastar al mundo, Shiva para salvarlo, se bebió el veneno (Haalahala), perdió la conciencia y se cayó. El calor resultante afectó al mundo. El veneno era tan mortal que su garganta se tornó azul, por ello Shiva se ganó el epíteto de Nilakantha, La Garganta Azul. Entonces, para enfriar su cuerpo ardiente, Shiva creó los Himalayas, luego los colocó en su estómago y estos absorbieron todo el calor de su cuerpo y recién entonces pudo levantarse.

Se supone que Shiva ha dicho en el Linga Purana que queda todavía mucho veneno en este mundo y aquellos que podrían beber ese veneno son los héroes reales. De hecho los dos, el veneno y el néctar residen en los corazones de hombre y sólo cuando las almas humanas son libres del veneno pueden ellos experimentar las alegrías de néctar.

Vala

Texto Védico  

En el comienzo de los tiempos, vivió un demonio llamado Vala, quien compitiendo con Indra, se convirtió en un tiránico gobernante del universo.

Los semidioses oprimidos, a través de un engaño colocaron a Vala como un animal presto al sacrificio ritual, y una vez atado Vala a la estaca sacrificatoria, los semidioses abandonaron el simulado ritual de sacrificio y dieron muerte al poderoso demonio.

Una vez que descuartizaron su cuerpo, los restos se transformaron en gemas preciosas mientras un rugido tormentoso aparecía entre las regiones celestiales. Tanto las deidades como los demonios se lanzaron a recoger estas gemas. Sus gritos generaron una ola de susto que empujaron a algunos de los seres místicos abajo, a la esfera terrenal.   

Algunas de estas semillas entraron entonces en los ríos, algunas en los océanos, y otras en los bosques y montañas. Allí germinaron como vetas de las distintas gemas, y cada una imbuyó con su propia potencia intrínseca a las piedras preciosas creadas.   

Todas estas gemas desarrollaron poderes talismanicos. De entre estos poderes conferidos, las piedras prósperas pudieron neutralizar entonces distintos venenos minerales, venenos de serpientes, enfermedades, y otros peligros para la salud y la integridad.

Rubíes, esmeraldas, zafiro azul, ojos de gato, el zafiro amarillo, diamantes, perlas, corales, y el cuarzo, fueron utilizados en la antigüedad entonces como antídotos o talismanes de origen divino, y con aplicabilidad para los mortales.

 

Amrita y Vishnu

Los dioses estaban perdiendo su fuerza en la lucha contra los demonios y decidieron pedir la ayuda de estos para realizar la enorme tarea de batir el océano de leche del cual sacarían el néctar de la inmortalidad (el Amrita). Para esta labor se reunieron todos, cada uno encargado de su parte. Como pivote para batir usaron el monte Mandara (Merú), la serpiente Vasuki, señor del mundo subterráneo, enrollada al monte, como cuerda para el batido y Vishnu en forma de gigantesca tortuga como base. No estaba en los planes de los dioses compartir el néctar con los demonios.

Echaron al océano poderosas plantas mágicas. Vishnu sugirió que los demonios debían tomar la cola de la serpiente, pero ellos sospechando un engaño, no aceptaron esto e insistieron en tomar la cabeza. Vishnu, que sabía que no lo aceptarían, puso a los demonios a la cabeza de la serpiente, cuyo aliento venenoso los adormecería y los dioses tomaron la cola. Cada quién en su extremo debía de tirar alternadamente de la gigantesca cuerda. Poco después de comenzar, los demonios comenzaron a sentir el efecto del aliento sofocante y Shiva tuvo que correr a tragar la letal emanación para evitar que contaminara el océano de leche del cual surgiría el néctar, desde entonces Shiva tiene la garganta azul y Vasuki al deshacerse del veneno quedó purificado.

Tan pronto surgió el Amrita los demonios se apoderaron de él y comenzaron a pelear entre ellos para decidir quién sería el primero en tomarlo. Pararon de pelear por la presencia de una hermosa mujer llamada Mohini, que en realidad era el mismo Vishnu transformado. Los demonios al verla le pidieron que decidiera ella. Mohini aceptó y decidió que los dioses debían de participar e hizo colocar a dioses y a demonios en dos hileras enfrentadas. Mientras ella daba primero de beber a los dioses, Vasuki haciéndose pasar por un dios se colocó entre Surya (el Sol) y Chandra (la Luna) pudiendo así tomar el Amrita. Chandra y Surya lo descubrieron y lo dijeron a Vishnu quien inmediatamente le lanzó su disco y lo partió en dos. Pero ya era inmortal y sus dos partes se convirtieron en Rahu, la cabeza, y Ketu, la cola. La madre de Vasuki tomó la cabeza y cuidó de ella, a esta le creció un cuerpo. La cola fue cuidada y educada por el sabio Jaimini, a la cual le creció una cabeza.

Ambas partes fueron puestas en el cielo como los nodos ascendente y descendente de la Luna y les fue permitido devorar ocasionalmente al Sol y a la Luna, dando origen así a los eclipses.

Garuda
Los dioses hindúes más importantes son asociados con animales particulares que se convierten en sus vehículos.
La imagen de Garuda es muy popular actualmente. El motivo de las alas incluso ha sido adoptado por el estado Indonesio y ha sido incluído en la bandera nacional. Garuda es tambien el nombre de la aerolínea nacional.  El mito de Garuda  cuenta que salió del cascarón de un huevo enorme puesto por Didi, madre de gigantes. Didi perdió una apuesta y fue mantenida prisionera por serpientes del demonio.

Para librarla, Garuda tuvo que traer un elixir de una montaña rodeada por fuego y para apagarlo debió beber el agua de muchos ríos. Finalmente pudo conseguir el elixir para  los demonios. Se dice que Vishnu lo escogió como su vehículo porque Garuda obtuvo una resistencia especial por haber bebido de ese elixir.  

 

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Figura de Garuda, criatura gigante con rasgos humanos y de pájaro montado por Vishnu. Bali, Indonesia, Siglo XX   Altura: 100 cm  

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